25 ago 2006

Refutación (o Redefinición) de la felicidad

Una deficinición de la palabra felicidad refiere a un estado de ánimo que se complace en la posesión de un bien. Pero para mi, esa aseveración es errónea.

Tengo motivos para creer que felicidad y tiempo presente no son compatibles, ya que lo que modela la felicidad es el deseo y no el logro.

Una pareja no es feliz porque sus miembros se entienden de maravillas o porque se confiesen enamorados, sino porque van a irse el fin de semana a San Pedro en carpa, porque sus hijos se van a llamar Ivan o Tamara o porque algún pariente optimista y esperanzado ya les regaló un juego de respasadores.

En otro ámbito, un estudiante no es más feliz con un 10 que con un 9, y la dicha de un empleado administrativo no es mayor un sábado -con el fin de semana declarado e instalado- que un viernes a las 17 hs, planificando el partido de fútbol o el asado con los amigos.

Es más, un par de botas nuevo supone ser La Felicidad hasta que las tenemos. Y entonces ahí nos damos cuenta de que, si bien son fantásticas, no nos combinan con ningún saco.

Cada meta, cada objetivo, cada gol es un pasaporte a este universo de alegría, goce y bienestar, hasta que lo conseguimos.

La felicidad es el ímpetu gracias al cual cumplimos lo que nos proponemos y no la comodiad del podio.
Es la sensación inminente de que ese giro imposible esta vez sí nos va a salir, no la terminación del mismo, prolija y dentro del tiempo musical.
Es, en un exámen final, saber exactamente qué vas a contestar a la pregunta que te hizo el profesor y no la nota alta en la libreta.
Es el estado de ánimo que se complace en el deseo de un bien.

O la felicidad es también el estado trancisional y ficticio entre el momento en el cual crees que superaste todo y el preciso instante en el que el cretino abre la puerta de tu oficina con dos cafés "porque hace bastante que no hablamos".

19 comentarios:

Anónimo dijo...

Excelente!
Adhiero a tu redefinición. El ejemplo del examen final, cuando sos conciente de que sabés la respuesta es perfecto. Ahí sos feliz, absolutamente. Después con la nota, estás contento. Pero el pico de felicidad fue aquél.
Es como cuando salís con una chica por primera vez. El beso al final no es el momento de felicidad, si lo es ese momento en que te diste cuenta que el partido está ganado y lo único que hace falta es estirar la cabeza un poquito.

Anónimo dijo...

De acuerdo contigo. Tal vez estamos condenados a "desear" la felicidad... tal vez es sólo eso, una sensación, un mito.

Nefastas dijo...

son varios momentitos de satisfacción creo...y que gracias a haberlo deseado y logrado nos generan esa líbido.
Lo de las botas es tal cual, así como la ropa, las carteras, y todo artículo material que tenga que ver con el mundo femenino...
mi felicidad pasa por saber que NO voy a llamar a mis hijos ni johnatan ni jessica!!!

Sr. Nadie dijo...

Ya me parecía a mí, que este es un mundo y/o una vida de PORQUERÍA, en el/la cual estamos condenados a perseguir algo que nunca alcanzamos, porque cuando lo conseguimos ya es otra cosa (incluso ni nosotros somos los mismos).
Nada, un poco de optimismo para empezar el f.d.s.
Saludos

Mauro dijo...

Había una frase que decía que "ALGO" no era el destino sino una forma de viajar.

Más o menos que se aplica a esto. Además es el principio fundamental del Marketing, siempre somos seres carentes.

Betty Carol dijo...

enrico: ay, lo del beso lo iba a poner también. La felicidad tiene mucho más que ver con cuando te agarra la mano antes dirar la cabeza que con cuando definitivamente te besa.

Oiga, que es un muy buen tema de post ese de cuándo besar y cuándo no. Los signos y síntomas positivos y negativos. Voy a ver si se me ocurre algo.


intrínseca: Bienvenida!!!
Es que no está mal el deseo. Me parece perfecto. Cuando uno no desea nada sobreviene el caos.

nefastas: claro, pero una cosa es la felicidad y otra la no infelicidad. Creo.
La persona a la cual yo le nombre este nombre que uso para blogger tenía un hermano que se llamaba Marlon.

Capaz se lo pongo a mi hijo solo para reírme cada vez que lo llame a tomar la leche.


señor k.: Mi idea al escribir el post era otra, pero vengo de una exposición y me quería comprar un cuadro y estaban todos vendidos, así que yo y mi deseo insatisfecho nos vamos a dormir porque todo es una porquería.

m. Claro, el marketing es como una religión disfrazada de alfajor triple.

Lucky Luke dijo...

Mire no me sale decirlo muy claro todavía pero ya me va a salir: hay una relación indisociable entre la felicidad y el tiempo, y le diría que el que corta el bacalao es el señor Tiempo (y no le hablo de tiempo cronológico eh? no estoy diciendo que la felicidad viene en la vejez ni nada de eso). Le buscaré bibliografía al respecto.

Betty Carol dijo...

Mató mil *, lucky.

Quiero YA esa bibliografía


*hay expresiones de los ´80 que son sencillamente fabulosas. Y hoy estoy como emotiva

SOL dijo...

me gustó, y coincido con todo lo que decís, más de una vez he pensado todo esto!

Anónimo dijo...

si si, definitivamente es un buen tema. También voy a ver si se me ocurre algo y después compartimos los puntos de vista.
Me reconforta que haya pensado el mismo ejemplo.

Mikaelina dijo...

Rotundamente bueno.

Siempre y cuando ese deseo esté por cumplirse o sea un proyecto más o menos alcanzable. Si sueñas con lo inalcanzable se fastidió el invento.

La relación de la felicidad con el tiempo propuesta por Lucky me parece muy interesante, yo también creo que es el punto clave del asunto.

¿Seguro que no le hace más feliz un 10 que un 9? Si se lo sabía tan bien!!

Betty Carol dijo...

legally blonde: y yo que estaba preparada para que todos me digan que no, que la felicidad existe en tiempo real y que yo no tengo razón porque soy una neurótica insatisfisfecha caprichosa histérica.
Cosas como la que me dice Ud. me alivian un poco.

Creo.


Enrico:
Ahí está: Ud hace el del hombre y yo el de la mujer
O sea: yo les digo al publico masculino los signos positivos y negativos para besar a una chica y ud le dice a su publico femenino lo mismo. Basándonos en nuestra vasta experiencia, claro.

mikaelina: yo no sé de que habla lucky porque todavia no me paso la bibliografia EHHHHHHHHHHH LUCKYYYYYYYYYY!!!!!

Si fue un 10, fue demasiado fácil y no queda la inquietud de qué pasaba si estudiaba aún un poquito más.

Lucky Luke dijo...

Bueno bueno acá le traje un párrafo, y la referencia bibliográfica correspondiente, pero vea que es Filosofía pura eh? Después no vale que me persiga por toda la blogósfera para surtirme con los últimos zapatos que se compró y no le combinan ;-)
Ahí va: "Lo que cada vez (en cada “momento”) es, no está plenamente determinado, es decir no lo está hasta el punto de excluir el surgimiento de otras determinaciones. Creación, ser, Tiempo van juntos: ser significa por-ser, tiempo y creación se exigen recíprocamente. La humanidad no puede quedarse encerrada en su existencia “real”. Esto quiere decir que la humanidad tiene la experiencia del abismo o que el abismo se impone a ella. Al propio tiempo la humanidad fue hasta ahora incapaz de aceptar sencillamente esa experiencia. Esto podrá parecer paradójico pero es evidente a poco que se reflexione en ello: desde su origen y luego siempre, la religión responde a la incapacidad de los seres humanos de aceptar lo que incorrectamente se ha llamado “trascendencia”, es decir, la incapacidad de aceptar el caos y de aceptarlo como caos, de afrontar de pie el abismo. Lo que pudo llamarse la necesidad de religión corresponde a esa negativa de los seres humanos a reconocer la alteridad absoluta, el límite de toda significación establecida, el envés inaccesible que se constituye en todo lugar al que se llega, la muerte que mora en toda vida, el absurdo que rodea y penetra todo sentido...".

Castoriadis, C. (1986). Los dominios del hombre: encrucijadas del laberinto, Barcelona, Gedisa, pág. 187.

Leala 20 veces, desmenúzela, requetepiénsela, navéguela, naufráguela. Si no le cae ninguna ficha, inténtelo nuevamente todos los 31 de diciembre ;-)
Le mando un beso.

Clarixiña dijo...

Felicidad es re-encontrarte con tu mejor amiga de la primaria, después de 12 años sin verla. Y saber que podes seguir siendo amiga.
Y te invita al casamiento

Anónimo dijo...

Ud. no se priva de nada, hasta se adentra en cavilaciones filosóficas. Se me hace que es como una Bialet Masse con faldas; y en cualquier momento nos enteraremos que sus facetas e intereses tan plurales la llevaron a construir un dique (o en su versión local, no sé, a sanear el riachuelo).

Felicidades! (sea lo que fuere que eso signifique).

Betty Carol dijo...

Lucky: Eso es principio de incertidumbre a pleno!!!

Me encantó. Me encanta el principio de la incertidumbre, me encanta el desorden, la entropia, me encanta la segunda ley de la termodinámica, el caos, me encanta la humildad de saber que por más que lea todo lo que está a mi alcance, nunca voy a saber realmente nada. Me encanta y me da energías y hambre de querer seguir sabiendo. Esa es para mí la felicidad.
Y, de tan feliz que soy, no me importa que los zapatos re almodovarianos (fucsias, blancos y negros) que me compré los pueda usar a lo sumo dos veces al año.

Hoy me acordé de algo que me decía mi abuela, y es que nadie corre al tranvía una vez que ya se subió.

Es como esto que escribí, pero mas conciso.

clari: RE. Es eso y llorar como una imbécil porque la que fue tu amiga un año en el trabajo y que se habia re perdido te viene a visitar a la oficina con su futuro marido y la tarjeta y la noticia que después se va a vivir a España.


alan: ya me estaba preguntando por usted. Al final nunca abrió su blog???

Supongo que lo que me dice es bueno. Tuve mi furor ecologista a los 12, pero ahora trabajo para una multinacional atestada de demandas de greenpeace e inyecto ratones en un laboratorio de la facultad.

Ni aunque quiera quedo a salvo de la incoherencia.

Anónimo dijo...

Estimada, claro que lo que le digo es con la mejor intención, soy un admirador del Dr. Massé.

Finalmente no abrí mi blog, no lo he hecho, no. Sucedió lo siguiente: el tiempo que pensaba invertir en eso lo desvié al armado de una sofisticada web genealógica familiar. El motivo fue puramente utilitaista, pues ponderé en la descición las sólidas habilidades gastronómicas de mis numerosas tías.

¿Ve lo que yo? A cambio de poner sus fotos en la Net y sumidas en una subrepticia competencia por un lugar en la homepage, supongo me harán saber su cariño con muchas cosas ricas.

Puede me salga mal, mas no lo creo. Ya he testeado sus comportamientos con anteriores maniobras .


Reciba mis saludos.

emimx dijo...

"...Una deficinición de la palabra felicidad refiere a un estado de ánimo que se complace en la posesión de un bien..."

Es la peor definición que leí en toda mi vida! Y mejor hablemos de conceptos, porque "definir" es algo casi imposible.

A mi me gusta tener el concepto de que la felicidad consiste en recordar los buenos momentos! Es gratis, fácil y de esa manera podés ser felíz incluso viajando en la Línea D del subte un día laboral a las 18hs! hehehehe

FANSHAWE dijo...

adonde esta tu felicidad entonces ?

"Una pareja no es feliz porque sus miembros se entienden de maravillas o porque se confiesen enamorados, sino porque van a irse el fin de semana a Sierra de la Ventana, porque sus hijos se van a llamar J. o L. o porque algún pariente optimista y esperanzado ya les regaló un juego de respasadores."